Es tiempo de medallas, de hazañas, de figuras deportivos, de grandes gestas olímpicas, de mitos, de récords, de sueperación,… estos días los medios de comunicación nos enseñan una y mil veces imágenes de los héroes olímpicos. Pero son ellos los únicos héroes del mundo del deporte como dice un anuncio de nike «… de alguna manera hemos llegado a creer que la grandeza está reservada para unos cuantos, para las super estrellas. La verdad es que la grandeza es para todos. No se trata de bajar las expectativas, sino de elevarlas para cada uno de nosotros. Porque la grandeza no está en un sólo lugar, no en una persona especial. La grandeza está donde hay una persona tratando de encontrarla…»

Para mi la grandeza está en todas esas persona que nos entrenamos con la única motivación que nos da el placer de haber sido capaces de realizar algo, que nos tomamos todos y cada uno de los entrenamientos como un reto a superar. Aquellos que sólo miramos competir contra nosotros, que no buscamos el reconocimiento ni la admiración de nadie. Nos alimentamos del placer que nos da el realizar un esfuerzo o una hazaña, ante la incomprensión de tanta gente que no entiende el porque de nuestro esfuerzo y sacrificio, » todo eso para nada» dicen.

No se trata de ganarle a un adversario, sino de algo más duro.Se trata de ganarte a ti mismo, de aprender a gestionar y vencer todas las emociones y sentimientos que vienen cuando tus fuerzas y tu cabeza abandonan tu cuerpo. Se trata del proceso que eres capaz de experimentar y superar. Se trata de la victoria del día a día, de superar el dolor, de no rendirse ante las dificultades, de retomar fuerzas y continuar cuando todo te dice que no sigas.

Cada victoria nos endurece, porque también nos endurecen las derrotas sufridas. Las decepciones por las batallas perdidas contra ti mismo, hacen que vuelvas a los pasos de la humildad perdidos en la victorias. Volver a valorar lo hecho en anteriores hazañas realizadas, pero  no vivir de ellas. Dejar de aplaudir las hazañas de los demás, para escribir las propias con la fuerza de tu cuerpo y de tu mente.

Nuestra victoria no esta en una linea, ni en un tiempo, ni la dictamina nadie. Nuestra victoria reside en el interior, cuando aceptamos un reto y no nos rendimos para alcanzarlo. » No es grande aquel que nunca falla, sino el que no se da por vencido». La derrota no está en no ser capaz de hacer algo que te propones, sino en pensar que podemos llegar a hacerlo y no intentarlo. Asumimos el reto y nos ponemos a prueba, sin miedo alguno a la derrota, ya que la única derrota que contemplamos, es creer que puedes hacer algo y no dar ni un sólo paso para lograrlo.

Pd: Son las 00:04 y me levanto a las 05:00. Mañana toca un duro entrenamiento (72 Km de carrera por monte). Hay que motivarse de alguna manera. Espero llegar al final, pero sólo el hecho de poner el despertados ahora para levantarme a esa hora ya es una victoria.