septiembre 25, 2012 alimentación No hay comentarios

Son ya tres semanitas completas y la cosa funciona estupendamente. No tengo ni debilidad ni flaqueza, todo lo contrario, me siento estupendamente. Ni malos humores, ni ansias por comer, ni excesivo apetito… la verdad es que estoy un poco sorprendido de lo bien que me encuentro. Mi peso ronda los 67 kilos, pero a pesar de la delgadez me siento más vivo y con más energía que nunca. De no ser así no podría aguantar el ritmo de vida que llevo (10 horas minimo de trabajo al día, 2-3 de entrenamiento y 6 de sueño).

Esta es mi última semana vegetariana, y no creo que sufra variación alguna en cuanto a fuerza y estado de ánimo. Es más me veo con ánimo para afrontar algo un poco más duro. más complicado, y muy psicológico. Eliminar todos aquellos productos que tengan un origen animal de mi alimentación si me va a suponer un esfuerzo. A nivel mental voy a tener que ser muy fuerte y buscar muchas alternativas. Pero lo tomaré como un entrenamiento psicológico para mi próximo reto físico ( ya está decidido,pero por el momento no diré nada, tengo la fecha, el sitio… faltan apuntalar unos temas y ver como va respondiendo el cuerpo a las nuevas cargas).

Ser vegetariano durante este tiempo no me ha supuesto mucho esfuerzo, y como dicen por ahí » si consigues algo que no te supone esfuerzo alguno, no tiene mérito ninguno». No tiene mérito si no hay esfuerzo, es por eso que quiero llevar mi alimentación a un nivel más estricto. Quiero seguir jugando a controlar mi apetito ante determinados alimentos, a controlar mi mente ante deseos e impulsos de probar y comer ciertas cosas. Creo que si mi cabeza es capaz de controlar eso, seré más fuerte.

En la proxima entrada más información sobre el veganismo.